Rincón de la Fe » Lecturas » Lecturas del lunes, 21 de septiembre de 2020Lecturas del lunes, 21 de septiembre de 2020 Aquí podrás encontrar el Evangelio, el Salmo responsorial y las Lecturas del lunes, 21 de septiembre de 2020 domingo 20 de septiembre martes 22 de septiembre Primera lectura del lunes, 21 de septiembre de 2020 Lectura de la carta del apóstol san Pablo a los Efesios 4, 1-7. 11-13 Hermanos: Yo, el prisionero por el Señor, os ruego que andéis como pide la vocación a la que habéis sido convocados. Sed siempre humildes y amables, sed comprensivos, sobrellevaos mutuamente con amor;esforzaos en mantener la unidad del Espíritu con el vínculo de la paz. Un solo cuerpo y un solo Espíritu, como una sola es la esperanza de la vocación a la que habéis sido convocados. Un Señor, una fe, un bautismo. Un Dios, Padre de todo, que lo trasciende todo, y lo penetra todo, y lo invade todo. A cada uno de nosotros se le ha dado la gracia según la medida del don de Cristo. Y él ha constituido a unos, apóstoles, a otros, profetas, a otros, evangelizadores, a otros, pastores y maestros, para el perfeccionamiento de los santos, en función de su ministerio, y para la edificación del cuerpo de Cristo;hasta que lleguemos todos a la unidad en la fe y en el conocimiento del Hijo de Dios, al hambre perfecto, a la medida de Cristo en su plenitud. Salmo responsorial del lunes, 21 de septiembre de 2020 Salmo responsorial Sal 18, 2-3. 4-5 (R.: 5a) R. A toda la tierra alcanza su pregón. El cielo proclama la gloria de Dios, el firmamento pregona la obra de sus manos: el día al día le pasa el mensaje, la noche a la noche se lo susurra. R. Sin que hablen, sin que pronuncien, sin que resuene su voz, a toda la tierra alcanza su pregón y hasta los limites del orbe su lenguaje. R. Evangelio del lunes, 21 de septiembre de 2020 Lectura del santo evangelio según san Mateo 9, 9-13 En aquel tiempo, vio Jesús al pasar a un hombre llamado Mateo, sentado al mostrador de los impuestos, y le dijo: -«Sígueme.» Él se levantó y lo siguió. Y, estando en la mesa en casa de Mateo, muchos publicanos y pecadores, que habían acudido, se sentaron con Jesús y sus discípulos. Los fariseos, al verlo, preguntaron a los discípulos: -«¿Cómo es que vuestro maestro come con publicanos y pecadores?» Jesús lo oyó y dijo: -«No tienen necesidad de médico los sanos, sino los enfermos. Andad, aprended lo que significa “misericordia quiero y no sacrificios”: que no he venido a llamar a los justos, sino a los pecadores.» domingo 20 de septiembre martes 22 de septiembre