Partes de una dinámica cristiana

Todas y cada una de las dinámicas cristianas sirven para reflexionar acerca del perdón, del amor y de todo aquello cuanto Dios ha puesto en nuestro camino. Pero, a la hora de hacer una dinámica cristiana hemos de tener en cuenta cómo estructurarla. Así, las partes de una dinámica cristiana quedarán clasificadas por distintos bloques que conducirán a una conclusión final, donde el grupo asimilará la reflexión y aprendizaje en cuestión.

Pasos para hacer una dinámica de grupo

Pasos a seguir para construir una dinámica cristiana

A continuación, vamos a ver cómo desarrollar una dinámica cristiana en diferentes bloques. Cada una de estas partes tendrá un nexo en común que la comunique con la siguiente. Antes que nada, la persona que dirija la dinámica cristiana de grupo tendrá que encargarse de romper el hielo y dará entonces el inicio al juego cristiano. Por supuesto, antes de que de comienzo la actividad tendremos que haber establecido qué enseñanza perteneciente a la Biblia aplicaremos en la actividad en cuestión. Estos son algunos de los pasos a seguir para hacer una dinámica cristiana:


  1. Presentación del grupo.
  2. Presentación de la dinámica, destacando qué versículo bíblico será trabajado.
  3. Desarrollo de la dinámica. El grupo entra en contacto, se conoce, establece lazos, sabe escuchar a los demás, participa, consiguen una identificación y vinculación.
  4. Fin de la dinámica. El grupo al completo debe reflexionar y comprender la enseñanza. Es el proceso del saber, predicar con la palabra de Dios y su fiel ejemplo, el Evangelio.

Además, para amenizar la sesión puede hacerse uso de música de fondo, canciones cristianas que sean un reflejo de las oraciones cristianas más importantes.