Lecturas del viernes, 07 de septiembre de 2018


Aquí podrás encontrar el Evangelio, el Salmo responsorial y las Lecturas del viernes, 07 de septiembre de 2018

Primera lectura del viernes, 07 de septiembre de 2018

Lectura dé la primera carta del Apóstol San Pablo a los Corintios 4, 1-5

Hermanos: Que la gente sólo vea en nosotros servidores de Cristo y
administradores de los misterios de Dios.
Ahora, en un administrador lo que se busca es que sea fiel.
Para mí lo de menos es que me pidáis cuentas vosotros o un tribunal humano;ni
siquiera yo me pido cuentas.
La conciencia, es verdad, no me remuerde;pero tampoco por eso quedo absuelto:
mi juez es el Señor.
Así, pues, no juzguéis antes de tiempo, dejad que venga el Señor.
El iluminará lo que esconden las tinieblas y pondrá al descubierto los designios del
corazón;entonces cada uno recibirá de Dios lo que merece.

Salmo responsorial del viernes, 07 de septiembre de 2018

Salmo responsorial Sal 36, 3-4. 5-6. 27-28. 39-40;

V. El Señor es quien salva a los justos.
R. El Señor es quien salva a los justos.
V. Confía en el Señor y haz el bien, habita tu tierra y practica la lealtad;sea el
Señor tu delicia, y él te dará lo que pide tu corazón. R.
Encomienda tu camino al Señor, confía en él, y él actuará: hará tu justicia
como el amanecer, tu derecho, como el mediodía. R.
V. Apártate del mal y haz el bien, y siempre tendrás una casa;porque el Señor
ama la justicia y no abandona a sus fieles. R.
V. El Señor es quien salva a los justos, él es su alcázar en el peligro;el Señor los
protege y los libra, los libra de los malvados y los salva, porque se acogen a él.

Evangelio del viernes, 07 de septiembre de 2018

Lectura del santo Evangelio según San Lucas 5, 33-39

En aquel tiempo, dijeron a Jesús los fariseos y los letrados: Los discípulos de Juan
ayunan a menudo y oran, y los de los fariseos también;en cambio los tuyos, a
comer y a beber.
Jesús les contestó: ¿Queréis que ayunen los amigos del novio mientras el novio está
con ellos ? Llegará el día en que se lo lleven, y entonces ayunarán.
Y añadió esta comparación: Nadie recorta una pieza de un manto nuevo para
ponérsela a un manto viejo;porque se estropea el nuevo, y la pieza no le pega al
viejo.
Nadie echa vino nuevo en odres viejos: porque revientan los odres, se derrama, y
los odres se estropean.
A vino nuevo, odres nuevos.
Nadie que cate vino añejo quiere del nuevo, pues dirá: «Esta bueno el añejo».